
Por Tom Luongo
Después de los acontecimientos de este fin de semana en Rusia nos quedamos con muchas más preguntas que respuestas sobre lo que pasó con la rebelión abortada de Wagner Group Yevgeny Prigozhin contra Moscú. No estoy aquí para responder definitivamente a ninguna de esas preguntas porque nunca lo sabremos realmente.
Dicho esto, si lo que creo que ocurrió se acerca a la verdad, puede que se trate de una de las mayores victorias no bélicas de la historia moderna.
Empecemos por lo que sabemos. Prigozhin lleva meses quejándose de la falta de apoyo del Ministerio de Defensa ruso mientras sus chicos hacían todo el trabajo pesado en Bajmut. Sus problemas con el ministro de Defensa Sergei Shoigu son de sobra conocidos. También es probable que entre Prigozhin y el general Valeri Gerasimov no haya ningún desencuentro.
Al fin y al cabo, los enfrentamientos entre mandos militares no son inauditos.
Se podría argumentar fácilmente que Wagner fue contratado para arreglar el desaguisado causado por Shoigu, mientras que Gerasimov asumió la tarea más importante de reorientar el ejército ruso, alejándolo de los Grupos Tácticos de Batallones (BTG) y acercándolo a un ejército centrado en la infantería, más capaz de tomar y mantener el territorio.
Después de todo, está la inminente guerra con la OTAN.
También se podría argumentar fácilmente que sus éxitos dejaron a Prigozhin en una posición que le permitió exigir cambios y empezar a tener una gran cabeza.
Ahora, introduzcamos aquí el factor externo, el enemigo, la OTAN.
Pero, en realidad, son los neoconservadores estadounidenses y británicos los que se han pasado todas las horas del día dando puñetazos en la cara a Rusia con descarados movimientos de escalada para tratar de poner a Rusia y a Putin fuera de juego.
- Nordstream 2
- El bombardeo del puente del estrecho de Kerch
- La masacre escenificada en Bucha
- La explosión de la presa de Kakhovka
- Los atentados de Belgorod
- El contrabando de armas en Odessa bajo el auspicio del “acuerdo del grano”
La lista es casi interminable.
Oímos informes de que el FSB ruso frustró una operación de contrabando de Cesio-137 en Ucrania para simular un ataque con armas nucleares. Sal algunas de estas cosas a gusto, pero en el mundo en el que he llegado a vivir no hay casi nada, ningún truco sucio lo suficientemente bajo, que en la desesperación los británicos y sus co-conspiradores estadounidenses no intentarían.
En mi visión del mundo, el MI6 y el Ministerio de Defensa británico se pasan todo el día, todos los días, ideando una nueva forma de justificar un conflicto más amplio entre la OTAN y Rusia. La destrucción y balcanización de Rusia ha sido, después de todo, su razón de ser durante más de 300 años.
Y, hasta ahora, esa heurística ha sido casi perfectamente precisa en la predicción de hacia dónde irían las cosas a continuación.
Así que, vamos a cortar a través de toda la mierda sobre esto, ¿de acuerdo?
De ninguna manera fue un asunto orgánico. Se ha estado construyendo durante meses. ¿Pero qué se ha estado construyendo?
Un tipo como Prigozhin podría fácilmente descorazonarse masivamente con el liderazgo de Rusia. ¿Podría ser hasta el punto de tomar las armas contra Putin? Bueno, eso es ciertamente lo que mucha gente quería hacernos creer este fin de semana.
Y de ninguna manera estoy sugiriendo que no es posible o incluso probable. Es la historia más probable.
Ahora hay que tener en cuenta las historias que circulan por ahí de que Prigozhin fue sobornado con miles de millones para que Wagner organizara su insurrección. ¿A alguien le sorprendería esto si alguna vez se descubriera?
¿Qué? ¿La CIA con maletas llenas de dinero para un descontento extranjero con delirios de grandeza?
¡¡Lo que tú digas!!
Recuerden, amigos, como vivimos en un mundo de desinformación, si no de mala información, tenemos que inventar historias que encajen con los pocos hechos que tenemos, además de evaluar cosas tan básicas como el motivo, los medios y la oportunidad.
La OTAN o la ruina
Además, las cosas se están acelerando hacia la Cumbre de la OTAN del 11 y 12 de julio, donde es obvio que los neoconservadores están presionando para que se haga una declaración o un cambio de política que será el último puñetazo en la boca para Putin.
No podrá ignorarlo porque violará una importante línea roja que ha establecido con asombrosa claridad.
Se trata de la adhesión de Ucrania a la UE o a la OTAN. Si alguien piensa que no son la misma cosa, que entregue su carné de geopolítica al ujier de la puerta.
Pero esto es exactamente lo que están impulsando los miembros más abiertamente hostiles de la OTAN, es decir, el ministro de Asuntos Exteriores británico, James Cleverly, y la ministra de Asuntos Exteriores alemana, Annalena Baerbock. Al mismo tiempo, los británicos están casi tan enfadados con el presidente Joe Biden como con el propio Putin.
¿Por qué? Porque Biden es el que bloqueó al ministro de Defensa del Reino Unido (¡un imbécil con un coeficiente intelectual de 60!) Ben Wallace para que sustituyera a Jens Stoltenberg como secretario general de la OTAN. Se suponía que esto iba a ocurrir el mes que viene. Se ha pospuesto y Biden ha instado a Stoltenberg a que se quede un año más.
Los británicos están empujando al mundo a la guerra.
Que Wallace se convierta en Jefe de la OTAN lo aseguraría.
La única buena noticia aquí es que los militares franceses, tanto como probablemente los americanos, preferirían ser pillados muertos en un baño con una prostituta menor de edad y un montón de cocaína que tener a un británico dirigiendo esta guerra.
Está claro que han prometido a todos un trozo del pastel después de que Rusia sea derrotada en Ucrania. Los polacos recuperan Lvov y partes de Bielorrusia. Los matones ucranianos del Sector Derecho consiguen acabar con los rusos en el Donbass, Hungría consigue Transcarphia (para crédito de Viktor Orban que no lo quiere en estos términos), Georgia consigue el Cáucaso…. etc.
Están siendo vitoreados por los Mortífagos en serie Lindsey Graham y Richard Blumenthal, que esta semana redactaron una resolución bipartidista para ampliar el alcance del Artículo 5 de la OTAN para incluir no sólo el uso por parte de Rusia de una bomba nuclear táctica, sino también cualquier radiación resultante de un accidente nuclear.
¿De verdad, Lindsey, como si no pudiéramos ver el montaje aquí en lo que se refiere a la central nuclear de Zaporizhia?
Los sobornos han estado volando por todas partes. Y Wallace como jefe de la OTAN aseguraría que la iteración final de la estrategia británica de “divide y vencerás” funcionara. Pero Biden dijo que no.
Y esa es la pieza de este rompecabezas que me dice que hemos llegado al crescendo de este disparate.
Que quizá, sólo quizá, el Pentágono e incluso Davos se están bajando de este tren.
Putin: ¿suerte, inteligencia o ambas?
Con todo esto en el bolsillo, veamos ahora los acontecimientos de este fin de semana.
Aquí está tu lista rápida y sucia de éxitos:
- Prigozhin puede o no haber sido sobornado por la CIA/MI6 con dinero y sueños de gobernar el Cáucaso. Un largo sueño de los británicos para negar a Rusia el petróleo y el gas de esa región.
- Petróleo, gas y carbón que Ucrania y Europa necesitan desesperadamente.
- Sale con alguna declaración ridícula sobre Putin mintiendo sobre las razones de esta guerra.
- También implica al Ministerio de Defensa ruso en la dispersión de Wagner.
- Comienza la marcha hacia Moscú.
- Hay informes no confirmados de helicópteros derribados. Combates, etc.
- Los neoconservadores se ponen a decir que esto es el fin para Putin.
- Twitter se vuelve ilegible.
- El líder checheno Ramzan Kadyrov sale en apoyo total de Putin.
- También el Ministerio de Defensa ruso.
- No hay desertores del ejército ruso.
- Hay pequeños altercados en St. Petersburg y Moscú.
- Putin sale y pronuncia su discurso denunciando a Prigozhin como “traidor”. Está más enfadado que nunca.
- El Presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, negocia con Prigozhin y en menos de una hora todo ha terminado.
Lo que empezó como la “Caída del malvado Imperio Ruso” terminó con un “¿Chúpate esa?” en cuestión de horas.
Los neoconservadores pasaron de babear de expectación a llorar en sus cafés con leche en unos 15 minutos.
El desenlace final es lo que realmente rompe la cabeza si se cree por un momento que Prigozhin no era una marioneta de alguien: de Putin o de las agencias de inteligencia occidentales.
Las fuerzas de Wagner serían trasladadas a Bielorrusia. Todos los cargos de insurrección serían retirados para aquellos que marcharon. A los que se retiraran y no apoyaran a Prigozhin se les ofrecerían contratos con el ejército ruso directamente.
Prigozhin no sería ejecutado como traidor.
Ahora, ¿te crees algo de esto? Pero estos son los hechos anunciados. Y aunque a los Neoconservadores les gustaría que creyeras que “esto no ha terminado”. Putin ha sido debilitado. La realidad aquí es muy, muy diferente.
Por lo tanto, aquí hay tres escenarios probables en cuanto a lo que realmente sucedió. Sin embargo, no son exhaustivos.
Escenario #1 – Prigozhin se rebeló de verdad
Con el respaldo de Occidente, Prigozhin se lanza a por todas. Presintiendo que sus atentados contra el gobierno de Putin tendrían éxito gracias a las garantías de que los partidarios de la línea dura en Rusia le cubren las espaldas, la CIA/MI6 se lanza a por el oro. Prigozhin sigue en un estado hipercombativo, enfadado y angustiado por la incompetencia de Shoigu y la pasividad de Putin.
Como las puñaladas por la espalda no son inauditas en la oligarquía rusa, está convencido del complot contra él. Puede que incluso le cuelen dinero y promesas de que gobernará en Rostov del Don bajo la zanahoria de la balcanización de Rusia.
Espera un levantamiento más amplio contra el gobierno de Putin, no lo consigue y rápidamente es sofocado.
Putin sabía todo esto, al igual que Occidente, y, al igual que sus rápidos movimientos para acabar con el intento de Nasarbaev de volver al poder en Kakajstán en enero de 2022 (con el evidente respaldo de la CIA/MI6), le dio a Prigozhin toda la cuerda que necesitaba para ahorcarse.
Si Prigozhin desaparece en las próximas semanas tendremos una respuesta mejor.
Escenario #2 – Prigozhin tendió una trampa a todo el mundo
Prigozhin empieza a despotricar contra el “MoD” uno o dos días después de asegurarse a Bajmut y empieza a hacer realidad los sueños de Occidente de que los partidarios de la línea dura están dispuestos a deshacerse de Putin por su pasividad. Esto no es inverosímil. Hay muchos en Rusia que están enfadados con Putin por no contraatacar.
Ataques como los de Nordstream y Kerch están diseñados para que Putin pierda “prestigio”. No es diferente a Nancy Pelosi yendo a Taiwán por China. Hacer que Xi pierda la cara, conseguir grandes chinos enojados. Ganar.
La pérdida de prestigio es un gran problema en la política interior de estos países. Pero, al mismo tiempo, tienes que darte cuenta de que Putin ha estado limpiando Rusia de activos occidentales. La razón principal por la que sabemos que “Putin encarcela reporteros” es porque esos reporteros que fueron encarcelados eran activos de inteligencia extranjeros, no periodistas.
Durante los años que lleva haciendo esto, sobreviviendo a múltiples intentos de asesinato y aprobando leyes que prohíben las ONG, Putin ha limpiado las calles de Moscú. Por eso hay que suponer que nuestro juego terrestre allí es realmente débil.
No es difícil creer que Prigozhin podría ayudar a alimentarles con toda la mierda que querían oír. Estamos hablando de gente cada vez más desesperada por llevar esta guerra más allá del punto de no retorno y Putin se niega a dárselo.
Así que, con esos antecedentes, es fácil creer que Prigozhin pone el anzuelo durante unos meses, incluso llega a aceptar unos cuantos miles de millones en “dinero perdido” para sellar el acuerdo.
Escenifica la salida, se pone en camino y “negocia” un acuerdo en el momento exacto en que su convoy habría tenido que girar a la izquierda e ir a Bielorrusia de todos modos.
Escenario #3 – Una reasignación estratégica
Durante los últimos diez años he observado cómo Putin se enfrentaba a las falsas banderas y provocaciones de Occidente y las convertía en victorias estratégicas apartándose del guión de la pizarra de Comunicaciones y Langley.
Prefiere participar en una “agresión paralela”, es decir, hacer un movimiento proporcional para contrarrestar otro acto de agresión abierta.
Así que, con esa idea de la agresión paralela en la cabeza, he aquí el escenario:
Si sabes que la OTAN se está preparando para ampliar el conflicto el mes que viene y que los británicos están suministrando a Ucrania misiles Storm Shadow para ablandar Crimea mientras las FAU luchan por avanzar en la mal llamada “contraofensiva”, entonces ¿no querrías tener a tus mejores y aguerridas tropas estratégicamente situadas para responder si las cosas se tuercen?
Mira el resultado de la Rebelión de Prigozhin. Wagner está ahora en Bielorrusia. Los desleales son carne de cañón para absorber cualquier cosa que Polonia intente hacer.
El resto está preparado para atacar a Kiev si a alguien se le ocurre ir a por Crimea.
Con la UAF molida a palos como atacante en el sur, una mala situación para ellos empeora ahora que Putin tiene un ejército que puede usar en Bielorrusia.
Recuerda, legalmente, esto no es una guerra. Putin no tiene vía libre para hacer ciertas cosas bajo el auspicio de un SMO. Por eso Wagner ha sido tan importante en los acontecimientos hasta ahora.
De hecho, me atrevería a decir que un montón de gente que sale de sus contratos militares rusos pueden ser “reasignados a Wagner” en el próximo par de semanas para reforzar sus filas.
Tu turno, OTAN.
Ah, y sólo para recordar a todos, Bielorrusia tiene ahora armas nucleares tácticas que Putin acaba de anunciar que trasladó al país. ¿Confía lo suficiente en Wagner como para darles esas armas nucleares? No voy a tocar eso ni con la polla de Lindsey Graham.
Y la verdad es que ninguno de estos escenarios cubre completamente lo que está pasando o incluso lo que ha pasado. El destino de Sergei Shoigu no se ha resuelto. Los partidarios de la línea dura pueden obtener su deseo con un nuevo ministro de Defensa de carácter más parecido a Prigozhin.
Se pueden sacar trozos de estos escenarios y volverlos a montar como si fueran Legos, y se tendrá algo interesante y digno de consideración.
Pero es difícil discutir el resultado final:
Una gran unidad militar con experiencia real de combate en las condiciones más duras está ahora estacionada a 150 millas de Kiev potencialmente armada con armas nucleares tácticas, mientras que Putin acaba de descubrir otra capa de quintos y sextos columnistas que se delataron a sí mismos en su afán de matar rusos con dinero estadounidense.
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