La deuda global alcanzar� los 100 billones de d�lares en 2024, impulsada por el gasto excesivo de gobiernos, especialmente en Estados Unidos y China, a pesar de las advertencias del FMI. A medida que las naciones incrementan su endeudamiento sin recortar gastos, el riesgo de una crisis financiera crece, con efectos negativos como menor crecimiento, salarios reales m�s bajos y p�rdida del poder adquisitivo.
Lo m�s seguro es que los gobiernos ignorar�n las recomendaciones de prudencia fiscal y aprovechar�n futuros choques para expandir su intervenci�n econ�mica, dejando a la clase media como la principal afectada.
Por Daniel Lacalle
Esta semana, el Fondo Monetario Internacional (FMI) advirti� que las proyecciones apuntan a una combinaci�n implacable de bajo crecimiento y alta deuda, augurando «un futuro dif�cil». El FMI destac� la necesidad de que los gobiernos reduzcan la deuda y reconstruyan reservas para enfrentar el pr�ximo choque, «que seguramente llegar� antes de lo esperado».
Sin embargo, esta advertencia llega acompa�ada de un sombr�o pron�stico. De mantenerse el ritmo actual de gasto, se proyecta que la deuda p�blica de Estados Unidos alcanzar� el **198% del PIB para 2050**, incluso sin considerar una recesi�n. Para los pa�ses del G-7, el nivel de deuda p�blica se disparar� al **188% del PIB**, mientras que la cifra global ascender� al 122%. Solo un pa�s reducir� su deuda: Alemania, que la bajar� del 63.5% al 42%. Por otro lado, Jap�n enfrentar� una situaci�n extrema con un endeudamiento del **329%** de su PIB.
Seg�n el �ltimo Monitor Fiscal del FMI, los niveles de deuda p�blica en todo el mundo alcanzar�n los **100 billones de d�lares en 2024**, impulsados principalmente por Estados Unidos y China.
Desobediencia gubernamental y el papel del FMI
Hist�ricamente, los gobiernos rara vez siguen las recomendaciones del FMI, especialmente cuando estas implican ahorrar o recortar gastos. Solo responden al llamado del gasto p�blico. Los mensajes del FMI en 2020 contribuyeron en parte a la crisis fiscal actual. En su Informe Anual 2020, titulado �Un a�o como ning�n otro�, el FMI alent� a los gobiernos a tomar medidas fiscales y financieras masivas para sostener a la poblaci�n y a las empresas. Sin embargo, tambi�n advirti� que la expansi�n r�pida del rol del Estado conlleva riesgos de corrupci�n, por lo que recomendaba: �Gastad lo que sea necesario, pero guardad los recibos�.
La �nica parte del consejo que adoptaron los gobiernos fue la de �gastar lo que sea necesario�. Y lo hicieron. De hecho, muchos consolidaron e incluso ampliaron los programas de gasto extraordinario de 2020, aumentando su intervenci�n en la econom�a y el gasto deficitario **durante per�odos de crecimiento econ�mico**.
El incremento de la deuda de Estados Unidos
Estados Unidos es uno de los pa�ses donde la deuda crece con mayor rapidez. En los pr�ximos cinco a�os, el FMI anticipa que la deuda p�blica estadounidense aumentar� casi tres puntos porcentuales cada a�o en relaci�n con su PIB, incluso en un entorno de crecimiento y creaci�n de empleo.
Los gobiernos no reducir�n el gasto
Es previsible que los gobiernos hagan caso omiso de estas advertencias. Como ya se ha mencionado, solo atienden al FMI cuando recomienda aumentar el gasto p�blico, pero lo critican cuando insta a reducir la deuda.
Los gobiernos m�s intervencionistas no reducir�n su gasto, especialmente mientras los bancos centrales mantengan bajas las tasas de inter�s. La situaci�n es a�n m�s preocupante en la eurozona, donde algunos organismos estad�sticos han revisado al alza el PIB de a�os anteriores, permitiendo as� m�s deuda, m�s gasto y m�s impuestos.
Riesgo de choque financiero y complacencia con la deuda
En una entrada de su blog, el FMI explica c�mo la incertidumbre econ�mica amenaza la estabilidad financiera global. Advierte que la complacencia respecto a la deuda podr�a combinarse con una desaceleraci�n significativa del crecimiento, aumentando el riesgo de un choque financiero. Sin embargo, el tono del FMI es demasiado optimista, suponiendo que los gobiernos ser�n fiscalmente prudentes. En realidad, la pandemia de COVID-19 abri� el camino hacia una irresponsabilidad fiscal r�cord.
La estrategia de muchos gobiernos consiste en aumentar los impuestos a los m�s ricos y a las grandes corporaciones, una de las excusas m�s repetidas en pol�tica fiscal, pero con escasos resultados hist�ricos. Pensar que los ricos y las empresas van a pagar 100 billones de d�lares en impuestos adicionales�en los pr�ximos diez a�os es desconocer tanto las matem�ticas como la historia.
Repetir viejas pol�ticas y sus consecuencias
Es probable que los gobiernos recurran nuevamente a las medidas de flexibilizaci�n monetaria cuando la situaci�n econ�mica se complique, empujando a�n m�s los l�mites de las pol�ticas fiscales. Sin embargo, esta pol�tica est� devastando a la clase media, una consecuencia que parece no importarles.
El impacto de esta bomba de deuda de 100 billones de d�lares se traducir� en menor crecimiento, salarios reales m�s bajos, represi�n financiera y p�rdida del poder adquisitivo de las monedas. En lugar de escuchar las recomendaciones del FMI, los gobiernos aprovechar�n el pr�ximo choque para aumentar a�n m�s su tama�o en la econom�a, justific�ndose con la necesidad de atender otra �emergencia�.

